Tenerife en cuatro días (II)

El segundo día en la isla nos propusimos visitar el sur, así que cogimos la autopista TF-5 desde Puerto de La Cruz pasando por La Laguna hasta la TF-2 para enlazar con la TF-1 dirección sur.  

Primera parada, Playa de los Cristianos, una playa muy preparada para pasar el día, hamacas, sombrillas...

Plantamos nuestras toallas en la arena y a disfrutar del sol. El agua congeladísima, nosotras que estamos acostumbradas a las temperaturas del Mediterráneo tardábamos un buen rato cada vez que entrábamos al agua. Eso sí una vez dentro se estaba muy muy bien.

Playa de los Cristianos

Un par de horas y cambiamos de playa, nos fuimos a la Playa de las Américas, una cala muy tranquilita en una zona por lo que vimos bastante turística. Muchos bares y chiringuitos. Comimos nada más llegar y al irnos nos comimos un helado que nos sentó genial.

Playa de las Américas

Ya que estábamos en el sur, habíamos organizado el día anterior, que iríamos a ver los acantilados que se sitúan en el lado oeste de la isla, Los Gigantes. Precioso. Hay varios miradores para poder tomar fotografías y disfrutar de la naturaleza. Desde allí mismo pudimos ver la isla vecina, La Gomera.

La Gomera

Tras disfrutar de los acantilados y ver las plantaciones de plataneros nos fuimos a las carreteras con más curvas que he visto. Curvas y más curvas para llegar al pueblo de Icod de los Vinos donde se encuentra el famoso Drago milenario. (Leyenda del Drago milenario aquí)

El Teide desde el Oeste de la isla

Drago de Icod

Icod de los Vinos

De vuelta a la carretera nos sentíamos como  un avión, el pueblo de Icod de los Vinos esta a una altura en la que puedes ver las nubes desde arriba. Una imagen que se repetió varias veces durante nuestra visita a la isla.

Conduciendo sobre las nubes

CONTINUARÁ...